Raimundo Amador aprendió el flamenco en la calle; y en el mismo ambiente conoció a los grandes del rock y del blues que tanto le han fascinado siempre y a los que ha intentado acercarse sin renunciar al flamenco: Dylan, Hendrix... Su capacidad de interiorizar todos los sonidos que escucha le ha convertido en uno de los principales artífices del mestizaje entre el flamenco y otras músicas; no en vano fue fundador de los dos grupos pioneros y más significativos de la fusión: Veneno (1977), con su hermano Rafael y Kiko Veneno, y Pata Negra (1981), a solas con su hermano. A este mestizaje Raimundo Amador llegaba ya curtido en el acompañamiento con su guitarra a cantaores y bailaores de su dinastía y a la familia Montoya y en colaboraciones con los grandes del flamenco: Paco de Lucía o Camarón, con este último ya con intención de hacer flamenco-rock. Tras la disolución de Pata Negra, Raimundo Amador emprendió su carrera como cantante y guitarrista, continuando y madurando el estilo que había creado junto a su hermano Rafael; esta vez en solitario, pero acompañado siempre de excelentes músicos en la banda que le acompaña en los conciertos o que colaboran en sus discos: Antonio Carmona, Remedios Amaya, Enrique Morente, Lole y Manuel, Tomatito, Sorderita, Ketama, Kiko Veneno, Juan Perro, Andrés Calamaro, Mala Rodríguez... y una lista casi interminable. La colaboración más conocida, y quizá la más apreciada por Raimundo, sea la del músico de blues B. B. King, que participó en su primer disco en solitario (Gerundina, 1995) y en uno de sus conciertos en Las Ventas de Madrid, también en el año 1995.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar